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| "Quiero seguir con la misma pasión de Comboni" |
La hermana Teresa Soto Botello hizo su profesión religiosa misionera el 12 de diciembre de 1983, en el Instituto de las Misioneras Combonianas. Después de su profesión estudió en la Ciudad de México para técnica en educación familiar. El 15 de agosto de 1990 hizo los Votos Perpetuos en Roma.
La hermana Tere, después de su preparación religiosa y profesional partió para el Chad, África en 1990 para llevar adelante su labor en la pastoral catequética y familiar. Hasta el 2008 estuvo en aquel pueblo africano compartiendo su vida, pero sobre todo su fe cristiana.
La República del Chad está ubicada en la parte norte de África Central. La ONU coloca al Chad como el quinto país más pobre del mundo porque más del 80% de la población vive por debajo del umbral de pobreza. La religión mayoritaria es el islam
La Congregación pidió a Tere un servicio en su país de México, así que dejó el Chad para estar en este país latinoamericano, donde ha estado del 2008 al 2014. Por un período de tres años fue superiora de la comunidad de la casa provincial, después pasó a la comunidad de la Costa Chica, en Oaxaca, para estar en medio de los afromexicanos. Durante este período de estadía en México, Tere ha estudiado la licenciatura en formación catequética para prepararse más para la misión que siempre demanda preparación.
Nuestra hermana misionera deja a sus padres nuevamente, a la Sra. Susana y al Sr. Alberto, quienes ya se están acercando a sus 80 años. ¿Es fácil dejar a los padres en esta situación de edad? Ciertamente no lo es, pero tanto ellos como Tere son personas de fe y saben que la vocación misionera pide dejarlo todo para salir a anunciar el Evangelio. Tere parte para el Chad con la bendición de sus amados padres.
Preguntado a Tere el por qué deja México nuevamente, ella contesta: "porque estoy enamorada de Dios y de su Reino. Quiero seguir con la misma pasión de Comboni".
¿Por qué esta hermana no se queda en México donde hay tantas necesidades también? Ella responde: "porque mi vocación es la misión ad gentes, es decir, para salir fuera de mis propias fronteras para compartir con otros pueblos mi fe en Jesucristo". Sí, Tere es fiel a Jesús que dice: "Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio" (Mc 16,15).
El mensaje que esta valiente hermana da a los jóvenes de hoy es el siguiente: "Jóvenes, déjense encontrar por Jesucristo ya que Él es el Tesoro más grande que puede llenar nuestras vidas; Él nos enriquece como seres humanos para que a la vez enriquezcamos a los demás".
Oremos por nuestra hermana Tere que esta noche, del 24 de septiembre, parte para África. Que su testimonio de dejarlo todo por amor a Jesucristo y a su Reino nos inspire a seguir a Jesús con alegría y a amarlo y servirlo con pasión ahí donde estamos.
¡BUEN VIAJE, QUERIDA TERE! Te extrañaremos pero estamos contentas de que sales para seguir viviendo tu vocación misionera con pasión y alegría.
